La situación de Job – es la ley para todo hombre. Mientras rico, conocido, en bienestar, Dios no responde. Cuando el hombre está sobre el basural, rechazado por todos, entonces aparece Dios y habla con el hombre, quien solo escucha y clama: "¡Señor, perdona!" Solo son diferentes los grados de las pruebas.
Lo importante, eviten juzgar a los prójimos. Cuando surge en la cabeza el juicio, enseguida diríjanse con atención: "Señor, dame ver mis pecados y no juzgar al hermano mío."
Él hablaba sobre la alta secuencia del camino espiritual, sobre lo que "para todo es necesaria la obligación. Sirvieron la comida, y tienen ganas de comer y sienten un perfume apetitoso, pero la cuchara sola no le traerá la comida. Hay que obligarse a levantar, acercarse, tomar la cuchara y entonces comer. Ninguna acción se produce enseguida – en toda parte se exige la espera y la paciencia."
La vida está dada al hombre para que le sirviera y no él a ella, o sea el hombre no debe hacerse esclavo de las circunstancias, no debe sacrificar su interior al exterior. Cuando el hombre sirve a la vida, pierde la dimensión, trabaja sin razonamiento y llega a una muy tristeperplejidad; él no sabe para que vive. Esta es una muy peligrosa perplejidad y a menudo ocurre: el hombre como un caballo tira y tira y de repente le llega un párate elemental.
Se pregunta, por qué camino ir a Dios. ¡Vayan por el camino de la humildad! Soportar humildemente las difíciles circunstancias de la vida, humilde paciencia ante las enfermedades enviadas por Dios; humilde esperanza que no serán abandonados por el Señor, Ayudante pronto y lleno de amor Padre Celestial; humilde oración sobre la ayuda desde lo alto, sobre la expulsión de la tristeza y sentimiento de desesperación, con las cuales el enemigo de la salvación trata de llevar a la desesperación, que es muy malo para el hombre, lo priva de la gracia y aleja de él la misericordia Divina.
El sentido de la vida cristiana, según la palabra del Santo Apóstol Pablo, que escribía a los Corintios: "…glorifiquen a Dios en sus cuerpos y sus almas que son de Dios." Así, habiendo escrito estas santas palabras en las almas y los corazones, hay que tratar que la disposición y acciones en la vida sirvan a la gloria Divina y ejemplo para los prójimos.
Alabado sea por siempre Dios Trino y Uno,
P. Jesús
Iglesia Ortodoxa Antioquena en México
P. Jesús
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